Nunca subestimes a nadie

Joven hace señal de L significando "Loser" (perdedor en ingles)
DISPONÍBLE TAMBIÉN EN AUDIO

Se dice que durante la Guerra Civil Estadounidense, un general del ejército de la Unión, llamado John Sedgwick, trató de burlarse del ejército confederado, diciendo:

– “¿Por qué los hombres esquivan tanto? Ellos (los confederados) no podrían acertar a un elefante desde esta distancia…

La historia registra que en ese preciso momento, el general recibió un disparo justo debajo del ojo izquierdo, proveniente de un francotirador a 914 metros de distancia, matándolo casi instantáneamente.

Subestimar la capacidad de los demás es dar fe de tu propia mediocridad. El general Sedwick subestimó la habilidad del enemigo. Sin embargo, a menudo subestimamos la capacidad de quienes nos rodean. No pocas veces, consideramos que nuestros compañeros de trabajo, amigos o familiares no son capaces de realizar esta o aquella actividad.

No debemos subestimar a nadie. Subestimar a un enemigo es una temeridad peligrosa y subestimar a un amigo es una total falta de respeto y consideración. Da confianza a los que te rodean. Dile a tu cónyuge cuánto crees en su potencial. Declara las virtudes de tus hijos. Delega responsabilidades importantes a tus empleados y compañeros de trabajo. Subestimar a los demás es una manifestación de orgullo, arrogancia y falsa superioridad.

Oración: Señor, no quiero subestimar a nadie. Si tengo enemigos, no quiero ser imprudente. Y a mis amigos y familiares, quiero creer y potencializar su capacidad. ¡Amén!

Versículo Base: Al orgullo le sigue la destrucción; a la altanería, el fracaso. Vale más humillarse con los oprimidos que compartir el botín con los orgullosos. (NVI) Proverbios 16:18-19

Loading

Compartilhe:

Adicionar um Comentário

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *