El Chimpancé Ham

Si usted y yo nunca viajamos al espacio (y posiblemente nunca lo haremos), sepa que hay un chimpancé que ya lo ha hecho. Se trata del Chimpancé Ham, que el 31 de enero de 1961 fue enviado por la NASA al espacio, convirtiéndose en el primer animal en realizar la hazaña. Después de la exitosa aventura, el Chimpancé Ham vivió varios años y murió de causas naturales en 1983, a la edad de 27 años.

El chimpancé Ham tuvo una vida extraordinaria. Vivió experiencias que ningún otro chimpancé pudo vivir. Y que la gran mayoría de los humanos tampoco vivió. Asimismo, creo que Dios tiene cosas extraordinarias para cada uno de nosotros. Quiere que vivamos mucho más allá de la “jungla” que conocemos. Pero para eso, tenemos que subirnos a esa nave. Necesitamos confiar en Él y entregar cada uno de nuestros sueños, metas y proyectos en sus manos.

¿Por qué vivir una vida en común, si ella puede ser extraordinaria? Hoy te desafío a buscar en Dios, el plan extraordinario que tiene para tu vida.

Oración: Señor, mi deseo es vivir la vida extraordinaria que has planeado para mí. Por eso te entrego todos mis sueños, planes y proyectos. Y confiaré en ti. ¡Amén!

Versículo base: Sin embargo, como está escrito: “Ningún ojo ha visto, ningún oído ha escuchado, ninguna mente humana ha concebido lo que Dios ha preparado para quienes lo aman.” (NVI) 1 Coríntios 2:9