“Familia es todos juntos, no separados”

Recortes de fotos de una familia, que vive junta, pero no comparte tiempo juntos.

Una frase que escuché muchas veces de mi pequeño Zach fue esta, del título de esta reflexión: “Familia es todos juntos, no separados”. Durante un tiempo, viajé mucho por motivos laborales. Salía de casa los lunes muy temprano y regresaba solo el jueves por la noche. Y mi hijo Zach me recordaba cada vez esta lección muy importante, que la familia fue diseñada para estar unida y no separada.

Por eso, es fácil entender que el propósito del diablo es siempre dividir a la familia. Y él comienza su trabajo con las más sutiles divisiones. En los días actuales, la división ocurre con cada uno en su habitación, en su celular o en su televisor. Empieza cuando la familia no se sienta más a la mesa para compartir la comida y cada uno come por su cuenta donde quiera. Pronto, padres e hijos simplemente solo “se encuentran” eventualmente dentro de la casa. Luego, ya no hay espacio ni lugar para compartir juntos, ya sea una película, una comida, una conversación, un juego de mesa o la lectura de un devocional en familia.

Deténgase unos momentos y busque en su memoria: ¿cuándo fue la última vez que su familia se reunió para un juego de mesa? ¿O para ver una película o ir al parque? Si no puede recordar, encienda una señal de advertencia y decide crear estos momentos para compartir con su familia. “Familia es todos juntos, no separados”, te diria mi hijo Zach.

Oración: Señor, quiero tener momentos para compartir con la familia, porque sé que te agrada y me hace sentir bien, a mí y a mi familia. ¡Amén!

Versículo base: En fin, vivan en armonía los unos con los otros; compartan penas y alegrías, practiquen el amor fraternal, sean compasivos y humildes. (NVI) 1 Pedro 3:8

Loading

Compartilhe:

Adicionar um Comentário

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *