El que quiera ser el más importante, debe servir

Una niña sirve algo en un plato

Nada es más contrario a los principios y verdades de este mundo que la Biblia misma. No en vano, Pablo afirmó que “la palabra de la cruz es locura para los que se pierden” (1 Corintios 1:18). Y uno de los aspectos más contradictorios de la Biblia y tan difícil de seguir es este: el que quiera ser el más importante, debe servir.

Cuando entras en un restaurante, ¿alguna vez has pensado que la camarera que te atiende es más importante que el que es servido? ¿Alguna vez pensó que en la sala de un gran ejecutivo, la señora que prepara y sirve el café es la más importante? ¿Sería el chofer del presidente de los Estados Unidos más importante que él? Es difícil pensar de esta manera.

Jesús vino a este mundo y sirvió, dándonos un ejemplo. ¿Te imaginas al presidente de los Estados Unidos lavando los pies de su empleada domestica? Este, sin embargo, fue el ejemplo dado por Cristo. Él, siendo Dios, lavó los pies de sus discípulos. También sirvió pan y pescado a la multitud. “Quien, siendo por naturaleza Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse. Por el contrario, se rebajó voluntariamente, tomando la NATURALEZA DE SIERVO…” (Filipenses 2:6-7).

Pregunto hoy: ¿has sido tú el que sirve o el que es servido?

Oración: Señor, quiero ser el que sirve. Enséñame Señor a ser un siervo, como lo fue Cristo. ¡Amén!

Versículo base: Pero entre ustedes no debe ser así. Al contrario, el que quiera hacerse grande entre ustedes deberá ser su servidor, y el que quiera ser el primero deberá ser esclavo de todos. Porque ni aun el Hijo del hombre vino para que le sirvan, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos. (NVI) Marcos 10:43-45

Loading

Compartilhe:

Adicionar um Comentário

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *