3 consejos para resolver conflictos

El año 193 d.C. fue conocido como el año de los 5 emperadores. Se llamó así porque este año, el Imperio Romano tenía 5 aspirantes al título de emperador. Con el asesinato de Cómodo el 31 de diciembre de 192, el alcalde de Roma, Pertinax, fue proclamado emperador. Pertinax, sin embargo, también sería asesinado el 28 de marzo y así, Didius Julianus fue declarado emperador. La división se extendió entonces hasta tal punto que otros tres se declararon emperadores en diferentes puntos del imperio: Pescenio Niger en Asia Menor, Clodio Albino en Britania y Septimio Severus en Panonia. Didio Juliano también sería asesinado el 1 de junio, poco más de 2 meses después de hacerse cargo del imperio. La división trae destrucción y muerte.

Jesús mismo dijo que si “un reino está dividido contra sí mismo, ese reino no puede mantenerse en pie”. Y es muy complejo gestionar cualquier grupo que esté dividido, ya sea tu empresa, un área específico o incluso la familia. Por eso, traigo aquí 3 consejos para resolver conflictos y divisiones, ya sea en la empresa o en la familia:

1. Diálogo: nosotros evitamos el diálogo, pero nos gustan las quejas. Una queja sale muy naturalmente, pero una conversación franca y abierta, no. No subestimes jamás el poder de una buena conversación.
2. Centrarse en el problema y no en la persona: el mayor error es centrarse en las personas y no en los problemas. Si alguien no hace algo como me gustaría, el problema es la acción en sí y no la persona que la realiza. Separe esas dos cosas e intente hablar con esta persona sobre la acción de manera específica, sin ataques ni referencias personales.
3. Empatía: ponte en el lugar del otro. Tratar de comprender una situación desde el punto de vista del otro es la mejor manera de resolver un conflicto. Desarrolle la capacidad de ver las cosas desde una perspectiva diferente a la suya. Todo comportamiento tiene una raíz o una razón de ser. La podrás encontrar poniéndote en el lugar del otro.

Que Dios te dé la sabiduría para tener una empresa o una familia unidas y no divididas.

Oración: Señor, quiero tener una familia y empresa con unión, sin divisiones, porque sé que donde hay división, hay destrucción. ¡Amén!

Versículo base: Si un reino está dividido contra sí mismo, ese reino no puede mantenerse en pie. Y si una familia está dividida contra sí misma, esa familia no puede mantenerse en pie. Igualmente, si Satanás se levanta contra sí mismo y se divide, no puede mantenerse en pie, sino que ha llegado su fin. (NVI) Marcos 3:24-26