¿Por qué dice la Biblia que vale más el fin de algo que su principio?

El capítulo 7 de Eclesiastés, hace una declaración interesante (y honestamente, incluso cuestionable). Ella dice que “Vale más el fin de algo que su principio“.

Los estudiosos afirman que Salomón escribió el Cantar de los Cantares en su juventud, Proverbios en la mediana edad y Eclesiastés en la vejez. Luego, al escribir este versículo, Salomón ya tenía una percepción más plena de la vida, pues ya se encontraba en su vejez.

Pero ¿por qué dice la Biblia que el fin de las cosas es mejor que su principio?

Salomón afirma que mejor es el fin de las cosas que su comienzo, porque de nada sirve empezar bien algo y terminarlo mal. En un maratón, no importa si empiezas primero, tienes que terminar en la primera posición. El escalador sólo celebra cuando llega a la cima de la montaña y en un viaje queremos llegar al destino, y no quedarnos a mitad del camino. En el fútbol, ​​el resultado del primer tiempo nunca será más importante que el resultado final del partido. No importa cómo empezamos, lo más importante es cómo terminamos.

Y para nuestra vida cristiana, mejor es el fin, donde estaremos en el reino celestial, con Cristo, que nuestro comienzo aquí en la tierra. Por eso, “una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante, sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece mediante su llamamiento celestial en Cristo Jesús”. (Filipenses 3:13-14).

Finalmente, alguien dijo una vez: “Aunque nadie puede volver atrás y cambiar su comienzo, cualquiera puede empezar ahora y cambiar su final”.

Decide hoy empezar a construir tu nuevo final.

Oración: Señor, aprendo de tu palabra que el fin de las cosas es mejor que su comienzo. Y quiero construir mi fin, siguiendo los principios que aprendo de tu palabra. Amén.

Versículo base: Vale más el fin de algo que su principio. Vale más la paciencia que la arrogancia. (NVI) Eclesiastes 7:8