Tu paz es tuya

Laguna espejada y una montaña. Salmos 34: 14

Recuerda algo para toda tu vida: tu paz es tuya. No dejes que el comportamiento de los demás te quite la paz. Si alguien te grita, esto sucede en el mundo exterior y puedes evitar que afecte tu interior. Cuando alguien cierra tu paso en el transito, también es algo que sucede afuera. Lo que sucede dentro de ti depende unicamente de ti. Eres tu quien decide si tu paz interior se verá alterada o no por los hechos externos.

La madurez y los años traen sabiduría. Y el arte de ser sabio es ignorar con inteligencia. Quien aprende a ignorar con inteligencia, no discute, no pelea, no se enoja. Simplemente se aleja de aquello que no suma. Cualquiera que aprenda a ignorar inteligentemente sabe que la opinión de otro no es una verdad absoluta y, por eso, se llama “opinión“. Cualquiera que aprenda a ignorar inteligentemente sabe que el mundo exterior no necesita dominar su mundo interior.

Tu paz es tuya. Solo depende de ti.

Oración: Señor, no quiero permitir que eventos externos me quiten la paz. Enséñame, Señor, a ignorar inteligentemente todo lo que pueda quitarme la paz. Amén!


Versículo base: “Que se aparte del mal y haga el bien; que busque la paz y la siga.” (NVI) Salmos 34: 14

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