Tan solo 0.6 milímetros

Un tornillo pequeño. Efesios 4:27

La história que te voy a contar sucedió hace 34 años. Fue el 10 de junio de 1990. En virtud de un mantenimiento mal hecho, la ventana del parabrisas de un avión BAC 1-11 se soltó y el capitán Tim Lancaster fue succionado para fuera del avión, quedando con el cuerpo parcialmente fuera de la aeronave. Aunque un copiloto y un miembro de la tripulación jalaban al capitán por las piernas, la presión de la altitud era más fuerte y no fue posible traer al capitán de vuelta a la cabina.

Así que por 21 minutos, el capitán quedo expuesto, con más de la mitad del cuerpo fuera de la cabina, volando a 600 km/h y una temperatura de menos 50 grados. Increíblemente, el Capitán Tim Lancaster sobrevivió, sin embargo, tuvo que ser hospitalizado con fracturas en los brazos y quemaduras en la cara.

Pero, ¿cuál fue el error de mantenimiento? Se utilizaron tornillos de tamaño incorrecto, solo 0.6 milímetros más estrechos que los originales. Por solo 0.6 mm, el piloto casi fue expulsado del avión. Por solo 0.6 milímetros, el avión podría haberse estrellado y matado a todos a bordo. Solo 0.6 mm fueron suficientes para encaminar una tragedia.

Esa historia, me pone a pensar que hay muchos 0.6 milímetros en nuestra vida. Esos hábitos que consideramos pequeños y sin importancia como mentiras, “fake news” o chismes. Tal vez una “mirada” a las fotos de esa niña o un “Buenos días” enviado a alguien que no es su esposa. Podría ser ese café con el compañero de trabajo o esas canciones depresivas que me gusta escuchar. Sí, hay muchos 0.6 milímetros en nuestra vida, esperando el momento adecuado para la tragedia. Ciertamente ha identificado algunos de ellos en esta pequeña reflexión.

Mi desafío hoy para ti es identificar y eliminar cualquier tornillo no estándar, fuera del padrón, 0.6 mm menor, que pueda tener en su vida. No dejes huecos vacíos, no dejes espacios sueltos para que el enemigo venga y destruya tu vida. No deis lugar al diablo.

Oración: Señor, no quiero dejar espacios sueltos que puedan llevarme a una vida de pecado. Amén!

Versículo base: Por lo tanto, dejando la mentira, hable cada uno a su prójimo con la verdad, porque todos somos miembros de un mismo cuerpo. “Si se enojan, no pequen.” No dejen que el sol se ponga estando aún enojados, ni den cabida al diablo.” (NVI) Efésios 4: 25-27

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