¿Quién agitó el pote?

Si pones 100 hormigas negras y 100 hormigas rojas en un pote de vidrio, no pasará nada. Pero si sacudes el pote violentamente, notarás que las hormigas van a pelear, unas contra otras, las negras creyendo que las rojas son sus enemigas y las rojas, creyendo que las negras son sus oponentes. Sin embargo, el verdadero enemigo es el que agitó el pote.

Sucede algo muy parecido, sobre todo en las familias. Un pequeño evento se convierte en una gran discusión. No somos capaces de darnos cuenta de que el diablo es quien “agita el pote”. Un vaso que cae, una respuesta “torcida”, un olvido, a menudo son sólo trampas del enemigo para provocar discusiones y divisiones en la familia.

Sin embargo, si estamos atentos, podemos percibir estos escollos e identificar al que “agitó el pote”. Entonces, dejaremos de pelear entre nosotros y habrá cada vez menos discusiones y peleas, porque el enemigo desenmascarado desaparecerá, huyendo, como el cobarde que es.

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Oración: Señor, quiero estar pendiente de cada trampa que el enemigo pone para causar división en mi familia, peleas en las relaciones y conflictos entre compañeros de trabajo. ¡Amén!

Versículo base: Pónganse toda la armadura de Dios para que puedan hacer frente a las artimañas del diablo. Porque nuestra lucha no es contra seres humanos, sino contra poderes, contra autoridades, contra potestades que dominan este mundo de tinieblas, contra fuerzas espirituales malignas en las regiones celestiales. (NVI) Efésios 6:11-12