¿Qué es lo que buscas?
Si te pregunto, ¿cuáles son tus grandes metas en la vida, qué te viene a la mente de inmediato? ¿Qué es lo primero que piensas? Puede haber pensado en una carrera exitosa. Es posible que haya pensado en un casa para dejar como herencia a tus hijos. Quizás pensó en que deseas la mejor universidad del país para tus hijos. O, pensó en tu sueño de ser empresario, dueño de una empresa, para lograr su independencia financiera.
Todas estas cosas son importantes, pero son temporales. Es decir, duran mientras dura esta vida. Carrera, hogar, formación profesional, empresa, todo tiene una fecha de vencimiento. Termina con nuestra vida terrenal. ¿Cuánto más importante sería buscar las cosas que son eternas? La salvación de mis hijos, de mis amigos y de mi familia tiene un impacto en la eternidad. Una vida dedicada a cumplir el propósito de Dios aquí en la tierra construye cimientos en la eternidad. Las cosas eternas siempre serán más importantes.
Oración: Señor, yo deseo las cosas terrenales. Quiero tener una carrera, casa para mis hijos, una universidad para ellos y un negocio exitoso. Pero hoy te pido que estas cosas no sean más importantes que las eternas. Mi deseo, Señor, es poner las cosas de tu reino primero. Amén!
Versículo base: “Así que no nos fijamos en lo visible sino en lo invisible, ya que lo que se ve es pasajero, mientras que lo que no se ve es eterno. ” (NVI) 2 Corintios 4: 18