¿Puede haber bondad en un hombre cruel?
¿Puede existir bondad en una persona esencialmente mala?
Es posible que tomando los últimos 100 años de nuestra historia, Adolf Hitler aparezca en todas las listas de personas más crueles y perversas que pisaron esta tierra. Los números hablan por sí solos, ya que su régimen asesinó deliberadamente a 6 millones de judíos.
Pero hubo un judío que fue alcanzado por la misericordia del Führer. Un médico llamado Eduard Bloch, que era judío, envió una carta a Hitler pidiéndole protección contra las atrocidades que comenzaban a ocurrir contra los judíos. Sorprendentemente, Hitler atendió con la solicitud del judío e incluso ordenó a su fuerza militar conocida como SS que lo protegiera. Y si no fuera lo suficiente, lo nombró como “judío noble“.
Pero, ¿por qué Hitler tuvo compasión de este judío? Hitler creció en una familia de bajos ingresos y los servicios médicos eran muy caros. El medico Bloch siempre ayudó a la familia de Hitler cobrando los valores más bajos posibles y cuando la madre de Hitler se estaba muriendo de cáncer de pulmón, hizo todo lo posible para salvarla. Hitler siempre estuvo agradecido con el médico.
Creo que podemos encontrar el mal y el bien en cualquier ser humano. Pero lo que realmente marca la diferencia entre ser alguien bueno o alguien malo es nuestra alimentación diaria. Si nos llenamos a diario de contenidos de odio, discriminación, prejuicio y violencia, la bondad que hay en nosotros será sofocada. Sin embargo, si nos alimentamos diariamente de la palabra de Dios que nos enseña el amor, la misericordia, el perdón y la compasión, de igual modo, vamos a sofocar el mal que también habita en nosotros.
Que nosotros, tú y yo, elijamos el mejor alimento de cada día, que es la palabra de Dios.
Oración: Señor, quiero alimentarme de tu palabra a diario, para ser alguien conforme a tu corazón. Amén
Texto base: Digo, pues: anden por el Espíritu, y no cumplirán el deseo de la carne. Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne, pues estos se oponen el uno al otro, de manera que ustedes no pueden hacer lo que deseen. Pero si son guiados por el Espíritu, no están bajo la ley. (NBA2005) Gálatas 5:16-18