¿Por qué Dios no contesta mis oraciones?

Se dice que cierto hombre oraba a Dios todos los días, clamando por su bendición en sus negocios, para que pudiera tener éxito. Cada día, ese hombre le pedía a Dios solo una cosa: negocios exitosos. Sin embargo, pasaban los años y nada sucedía. Sus negocios estaban lejos de ser exitosos y lo que más hacía era acumular fracasos. Así que un día fue a buscar la orientación de su pastor y le contó sobre sus oraciones sin respuesta. Y él preguntó: “¿Por qué Dios no contesta mis oraciones?”

Ese Pastor conocía bastante bien a ese hombre y su familia. Luego, con amor, dijo:
–“Mi querido hermano, tu esposa está en una profunda depresión y tú lo sabes. ¿No deberías orar por ella primero? Tu hijo adolescente está usando drogas y tú también lo sabes. Tu matrimonio está al borde del divorcio. ¿No deberías estar clamando por la restauración de tu hogar? Dios contestará tus oraciones cuando comiences a orar por las cosas correctas”.

En Santiago, capítulo 4, versículo 3 nos dice: “Piden y no reciben, porque piden con malos propósitos, para gastarlo en sus placeres.”. El hombre de esta historia, más que negocios exitosos, necesitaba restaurar a su familia. Mejores negocios podría terminar facilitando el abandono de su familia, de manera definitiva, para vivir una vida independiente y egoísta.

El versículo 8 del mismo capítulo dice: “Acérquense a Dios, y Él se acercará a ustedes”. Cuando nos acercamos a Dios, sucede algo muy interesante: comenzamos a entender lo que es realmente importante y oramos por las cosas correctas. Somos transformados en nuestra visión de la vida y del mundo, y llegamos a conocer a un Dios que responde a las oraciones.

¿Qué le has estado pidiendo a Dios en oración?

Oración: Señor, quiero orar por las cosas correctas. Muéstrame cuando solo estoy orando por cosas egoístas, que no te agradan. Amén.

Versículo base: Piden y no reciben, porque piden con malos propósitos, para gastarlo en sus placeres. (NBA2005) Santiago 4:3