“No te quieren por ser como eres”

Kevin De Bruyne es un futbolista belga, que actualmente juega en el Manchester City, de Inglaterra. Pero un hecho, cuando solo tenía 15 años, marcó su vida e historia para siempre. Kevin estaba en las categorías inferiores de un club belga llamado Genk, que estaba a por lo menos menos 150 km de la ciudad donde vivía. Por lo tanto, tuvo que buscar un hogar de acogida en la ciudad de Genk. Encontró una familia que lo acogió y los consideró como padres adoptivos. Kevin estaba feliz y se sentía cuidado y protegido por esa familia. Después de pasar unos meses con esa familia, llegaron las vacaciones de invierno y Kevin viajó a casa. Antes de irse, sus “padres adoptivos” dijeron:
– “Aprovecha al máximo este tiempo con tus padres. Esperamos verte aquí el próximo verano”.

Viajó a casa, pero cuando llegó, encontró a su madre llorando. Inicialmente pensó que alguien había fallecido o que podría haber ocurrido alguna tragedia. Hasta que su madre le dijo:
– “Kevin, recibí una llamada de la familia de acogida. Ya no te quieren allí. Ya no podrás vivir en su casa en Genk”.

Las palabras de su madre lo tomaron por sorpresa. No podía entender lo que había sucedido. Y pregunto:
– “¿Pero por qué?”

Y la madre respondió:
– “Por raro. Dicen que eres raro. Callado, tímido, raro y difícil. No te quieren por ser como eres”.

Kevin de Bruyne dijo en una entrevista que esta experiencia, de ser rechazado, impulsó su carrera. Más que nunca, se comprometió en los entrenamientos y pronto fue ascendido al primer equipo del Genk.

Y cuando ya jugaba en el equipo principal y comenzaba a ser conocido a nivel nacional, los padres de acogida, un día, fueron al campo de entrenamiento, buscando un acercamiento, como si nada hubiera pasado. Kevin se dio cuenta de que solo querían aprovecharse del ahora famoso jugador y no los recibió.

Esta historia me recuerda que puedo ser rechazado en este mundo. Sin embargo, es mi decisión el qué hacer con este rechazo. Puedo simplemente lamentarme y asumir una posición de víctima, o puedo levantarme y luchar, aún con más fuerza, para superar los obstáculos y alcanzar mis metas.

Y si creo en Dios, puedo saber que, por más rechazado que sea en este mundo, Él nunca me abandonará. Eso es lo que el mismo Señor le dijo a Josué: “Mi mandato es: ¡Sé fuerte y valiente! No tengas miedo ni te desanimes, porque el Señor tu Dios está contigo dondequiera que vayas”.

No debemos temer ninguna adversidad. Nuestro Dios camina con nosotros.

Oración: Señor, gracias por esta historia y por todo lo que me enseña. Dame fuerzas para superar cualquier adversidad. Amén.

Versículo base: Mi mandato es: “¡Sé fuerte y valiente! No tengas miedo ni te desanimes, porque el Señor tu Dios está contigo dondequiera que vayas” (NTV) Josué 1:9