No te des por vencido para hacer lo correcto
Serie: Los fundamentos de una vida bien vivida!
Escrita por Mario Velandia – El camino para la Sanidad
“No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos”.
Gálatas 6:9 (NVI)
Si las cosas no suceden de inmediato, o cuando crees que deberían suceder, eso no significa que debas renunciar.
Necesitas ser diligente y tener resistencia. ¿Hay algo en lo que quieras darte por vencido? Tal vez sea tu matrimonio. Parece que está muerto y no va a ninguna parte. Tal vez sea tu carrera. Has intentado, e intentado hacer una diferencia, y simplemente no está sucediendo. Tal vez quisieras darte por vencido con un sueño o una meta, o incluso contigo mismo.
Aquí hay algo importante que debes saber. Mil años antes de que nacieras, Dios sabía que estarías leyendo esto el día de hoy, para que yo pudiera decirte como un amigo, ‘No te des por vencido’.
El túnel puede parecer extremadamente oscuro en este momento, pero siempre hay una luz al final. ¡Puede estar a la vuelta de la esquina! Eres amado por Dios —y tienes un propósito que Dios diseñó exclusivamente para que únicamente tú lo cumplas.
No pienses que lo que estás haciendo no importa. No te des por vencido en hacer lo correcto. No pienses que alguien estaría mejor sin ti. Esas son mentiras de la boca del mismo diablo. Recuerda lo que Dios ha dicho sobre ti. Recuerda que Dios siempre quiere bendecirte.
No te des por vencido. Mira a Dios. Encuentra una familia espiritual, una iglesia y un grupo pequeño, para que te ayude en los momentos difíciles. Medita en la Palabra de Dios para que te de aliento. Por encima de todo, no renuncies a Dios. ¡Él nunca se dará por vencido contigo!
Reflexiona sobre esto: •
¿A qué quieres renunciar hoy? ¿Por qué te parece un callejón sin salida? •
¿Cómo puede una familia espiritual, como un grupo pequeño, ayudarte en los tiempos oscuros? ¿Cómo has podido brindar ese tipo de aliento a alguien antes? •
¿Hay algo “correcto” que has estado haciendo que te haya agotado? ¿Por qué podría querer Dios que sigas adelante?
RECUERDA: ¡ERES UNA BENDICIÓN!
Devocional escrita por Mario Velandia