Mi matrimonio se esta acabando

Mi matrimonio se esta acabando ¿Qué debo hacer? Cambiar el enfoque.

Todos sabemos que no es fácil vivir en una relación. Por más que exista amor, pueden haber diferencias y cuando no sabemos cómo lidiar con ellas, los problemas pueden hacerse cada vez más grandes.

Por otro lado, tú y yo y todo ser humano en este planeta, tenemos estas dos cosas: necesidades y defectos. Y claramente hay necesidades distintas a las del otro y defectos diferentes a los nuestros.

Hay un secreto que puede ayudar a muchas parejas a salvar su matrimonio. Este secreto está en el enfoque correcto. Lo normal que vemos en nuestro mundo es poner atención a mis necesidades y los defectos del otro, cuando lo correcto sería exactamente lo contrario, fijarme en mis defectos y en las necesidades de mi pareja.

Si estás teniendo problemas en tu relación, quiero invitarte a hacer este ejercicio: piensa en las necesidades de tu cónyuge (¡ojalá las conozcas!) y luego, en las cosas que has hecho para satisfacer esas necesidades en los últimos 3 días. Luego, también piensa en tus defectos y en lo que has estado haciendo para evitar que afecten tu relación. Y créeme: tienes defectos. Si no puede pensar en ningún defecto, alerta máxima: probablemente tú eres el problema en la relación.

Y finalmente, nuestro texto de hoy es uno de los versículos más difíciles de seguir en toda la Biblia. Dice que debemos considerar “a los demás más importantes que nosotros mismos”, y más que eso, debemos velar no solo por nuestros propios intereses, “sino más bien los intereses de los demás”.

Empieza a considerar a tu cónyuge superior a ti, atiende sus necesidades, trabaja en tus defectos y estoy seguro que esta relación se fortalecerá.

Oración: Señor, quiero trabajar en mi relación, concentrarme en mis defectos y en las necesidades de mi esposa. Ayúdame Señor a ser un mejor esposo, sin esperar que ella primero sea una mejor esposa. Amén.

Versículo base: No hagan nada por egoísmo o por vanagloria, sino que con actitud humilde cada uno de ustedes considere al otro como más importante que a sí mismo, no buscando cada uno sus propios intereses, sino más bien los intereses de los demás. (NBA2005) Filipenses 2:3-4