Mi hogar, un lugar de paz

Construir un hogar de paz no es una tarea sencilla. Basta con pensar que cualquier familia está compuesta por más de 1 persona y cada persona trae consigo su “paquete” completo de experiencias pasadas, frustraciones y angustias. Un hogar comienza con 2 personas totalmente opuestas, con diferentes temperamentos, hábitos y comportamientos. El choque es natural. Y luego ya no son 2, son 3, tal vez 4 o incluso más. Y los nuevos seres que entran en esta familia están comenzando a formarse en medio de este proceso inacabado de fusión de 2 personas. Sí, se ha establecido el caos. Y el resultado de este “caos” es la división, las peleas, el rencor y, por veces el divorcio.

Luego miro la palabra de Dios y busco respuestas a esta difícil ecuación. Y encuentro los 3 pilares para establecer la paz en la familia. Y ellos son:

1. Amor: el primer y más grande fundamento es el amor. La Biblia dice que “el amor es paciente, es bondadoso. El amor no es envidioso ni jactancioso ni orgulloso, no se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor”, 1 Corintios 13: 4-5. Entonces no hay forma de tener un hogar tranquilo si no hay amor. Y el amor es una decisión, no lo olvides.
   
2. Humildad: la humildad es lo opuesto al orgullo. Un corazón humilde es aquel que se deja enseñar, que reconoce sus fallas y quiere ser transformado. “sean humildes y amables, pacientes, tolerantes unos con otros en amor”, Efesios 4: 2. Qué difícil es establecer la paz donde hay corazones orgullosos. Donde hay humildad, hay ternura y paz.
   
3. Empatía: la empatía es la capacidad de ponerse en el lugar del otro. Y es interesante ver cómo juzgamos más rápida y fácilmente a los miembros de nuestra familia que a un extraño. “Que cada uno cuide no solo de sus propios intereses, sino también de los intereses de los demás”, Filipenses 2: 4. Un hogar donde hay empatía es un hogar donde hay paz.

Oración: Señor, quiero tener un hogar de paz. Un hogar donde el amor, la humildad y la empatía están presentes todos los días, para que podamos encontrar paz y descanso. Amén!

Versículo base: “Más vale comer pan duro donde hay concordia que hacer banquete donde hay discordia.” (NVI) Provérbios 17: 1