La gracia de Dios ha sido revelada a todas las personas
Sucedió el 6 de marzo de 1981. Un hombre llamado Klaus Grabowski estaba siendo juzgado por el asesinato de una niña de 7 años llamada Anna Bachmeier. Era el tercer día del juicio, cuando Marianne Bachmaier, la madre de la niña asesinada, ingresó al tribunal, sacó un arma y disparó 8 veces al acusado, quien murió instantáneamente.
Marianne Bachmaier fue posteriormente juzgada por asesinato y condenada a 6 años de prisión, de los cuales cumplió sólo la mitad y quedó en libertad condicional.
No había duda de que Klaus Grabowski era culpable. Ya había sido juzgado, 5 años antes, por abuso infantil y en ese nuevo caso, su propia pareja lo había entregado a la policía, poco después de que se deshiciera del cuerpo de la pequeña. Además, ya había confesado su crimen, aunque había culpado a la menor, afirmando que ella lo había “seducido”.
Klaus era una persona horrible y no hay dudas de que merecía la muerte, quizás mucho más que nadie en este mundo. Sin embargo, la decisión sobre su muerte no debería ser de Marianne. “El Señor da tanto la muerte como la vida”, según 1 Samuel 2:6.
Mis amados hermanos, traigo aqui una historia tan escalofriante como esta, para decir: Jesús murió en la cruz, por personas como usted, como yo y como Klaus Grabowski. Cristo también murió por Marianne Bachmaier y por su pequeña hija. Porque cuando todos merecíamos la muerte, Él nos rescató. Y su gracia y misericordia fueron manifestadas y están disponibles, incluso para los seres humanos más crueles.
Esto es lo que también aprendemos en Tito 2, versículo 11: “Pues la gracia de Dios ya ha sido revelada, la cual trae salvación a todas las personas.”. Las palabras “todas las personas”, incluye aún a los violadores de niños. Y no nos corresponde a nosotros tomar la justicia por nuestra mano. No nos corresponde, ni a usted ni a mí, juzgar, condenar y aplicar la sentencia. Finalmente, Dios “juzgará a cada uno según lo que haya hecho.”, según Romanos 2:6.
Oración: Señor, quiero dejarte a ti todo el juicio. Descanso en Romanos 2, versículo 6, sabiendo que tú eres un Dios justo. Pero también entiendo que tu gracia salvadora puede alcanzar incluso a un violador, y no soy nadie para cuestionarlo. Amén.
Versículo base: “Pues la gracia de Dios ya ha sido revelada, la cual trae salvación a todas las personas”. (NTV) Tito 2:11