La discusión

Ricardo dos Santos, más conocido como Ricardinho fue una gran promesa del surf brasileño. Su vida, sin embargo, terminó trágicamente en un crimen motivado únicamente por la falta de autocontrol. Era el 19 de enero de 2015 y Ricardinho y su padre estaban trabajando en un proyecto de construcción en su casa, en Guarda do Embaú, en Palhoça-SC (cerca Florianópolis), cuando el policía militar Luiz Paulo Motta Brentano, que en ese momento se encontraba fuera de servicio, estacionó su automóvil donde había una tubería. Ricardinho pide que el retire su carro, lo que disgusta al policía militar. Se produce una discusión que termina con dos disparos del policía contra Ricardinho, que murió al día siguiente. El ahora ex-policía militar Luiz Brentano fue sentenciado a 17 años de prisión, pero emigró al régimen semiabierto en mayo de 2020.

Una discusión, falta de autocontrol y pistola en mano. La suma de estos 3 ingredientes siempre terminará en tragedia. Pero si pudiéramos eliminar cualquiera de estos 3 elementos de la escena, la tragedia no sucederia.

Por tanto, lo primero es evitar cualquier discusión. Romanos 12:18 nos pide que “vivamos en la medida de lo posible en paz con todos”. Esto significa que debemos evitar las discusiones. El siguiente paso es tener tu propio dominio. No puedo garantizar que el otro lo tenga, pero yo puedo tenerlo, si estoy lleno de los frutos del Espíritu Santo, según Gálatas 5. Y finalmente, el arma. Si bien, no puedo decidir que la otra parte no tenga un arma, puedo yo decidir no tenerla. Puedo decidir no tener un arma que me haga actuar por impulso.

Dios bendiga tu día.

Oración: Señor, decido evitar discusiones, desarrollar mi propio dominio y no tener un arma que pueda ser herramienta para una tragedia. ¡Amén!

Versículo base: –Guarda tu espada –le dijo Jesús–, porque los que a hierro matan, a hierro mueren (NVI) Mateo 26:52