La batalla que no vemos

Soldados avanzando en campo de batalla en medio a neblina. Daniel 10: 12

Algunos versículos o capítulos de la Biblia nos traen información valiosa. El texto de Daniel 10 es uno de ellos. El profeta Daniel tiene una visión y en ella se le apareció un ángel del Señor con un mensaje. Pero dos cosas en el capítulo 10 me llaman mucho la atención.

La primera está en el versículo 12. El ángel dice que desde el primer día se escucharon las oraciones de Daniel. Mira, desde el primer día. Nuestro Dios escucha nuestras oraciones desde el primer día. Incluso cuando la respuesta no ha llegado, necesitamos entender y saber que nuestro Dios escucha nuestras oraciones. Y seguir orando.

La segunda cosa que observé, está en el versículo 13. El ángel dice que durante 21 días trató de responder la oración de Daniel. Pero durante estos 21 días, fue impedido por el príncipe de Persia, un principado que lo impidió. Es decir, hay una batalla espiritual que no vemos, hay una guerra que no conocemos. Y cuanto más oramos, más poder y autoridad ganamos en el mundo espiritual para que podamos ganar esta guerra.

De ahí la invitación a “orar sin cesar” registrada en 1 Tesalonicenses 5: 17. Que podamos tu e yo perseverar en la oración para ganar esta guerra que no vemos.

Oración: Señor, quiero aprender a orar sin cesar. No quiero desanimar porque tu respuesta no ha llegado. Por el contrario, quiero orar más por la victoria en esta guerra espiritual. Amén!

Versículo base: “Entonces me dijo: No tengas miedo, Daniel. Tu petición fue escuchada desde el primer día en que te propusiste ganar entendimiento y humillarte ante tu Dios. En respuesta a ella estoy aquí. Durante veintiún días el príncipe de Persia se me opuso, así que acudió en mi ayuda Miguel, uno de los príncipes de primer rango. Y me quedé allí, con los reyes de Persia.” (NVI) Daniel 10: 12-13

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