En paz me acuesto y me duermo

Una mujer durmiendo. Salmos 4: 8

En Brasil hay un dicho que dice “mente vacía, taller del diablo”. Pero me atrevo a decir que una mente demasiado llena también. Una de las trampas de nuestro enemigo, el diablo, es sobrecargar nuestras mentes con preocupaciones, trabajo y pensamientos que no nos permiten hacer algo fundamental, creado por Dios y esencial para todos los seres humanos: descansar.

¿Cuándo fue la última vez que dormiste al menos 8 horas en una noche? ¿O eres una de las personas que se acuesta y tarda mucho en dormir porque tu mente sigue trabajando? El Salmo 4: 8 dice: “En paz me acuesto y luego me duermo, porque solo tú, Señor, hazme vivir a salvo”. ¿Es este verso una realidad en tu vida?

El Salmo 23 dice: “El Señor es mi pastor, nada me falta; en verdes pastos me hace descansar. Junto a tranquilas aguas me conduce”. Si descansar es una promesa de Dios en la Biblia, pero no logro descansar, esto puede ser un indicador de que necesito trabajar en ello, limpiar mi mente de toda preocupación y sobrecarga. Para que así, finalmente, pueda descansar.

Oración: Señor, quiero despejar mi mente de toda sobrecarga y descansar en ti. Amén!

Versículo base: “En paz me acuesto y me duermo, porque sólo tú, Señor, me haces vivir confiado.” (NVI) Salmos 4: 8

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