En el muelle de San Blás

“En el muelle de San Blás” es una canción del grupo mexicano Maná. Lo que pocos saben es que su letra cuenta una historia real. La canción cuenta la historia de Rebeca Méndez, quien el 13 de octubre de 1971 se despidió de su prometido, con quien se casaría 4 días después. Su novio embarcó en un barco de pesca en el muelle de San Blás, Nayarit, México. Pero una triste fatalidad ocurrió esa noche: el huracán Priscila, causó el hundimiento del barco, y no hubo sobrevivientes.

La canción cuenta que desde entonces, Rebeca ha permanecido, en el muelle de San Blás, esperando el regreso de su amor. Como nunca fueron encontrados los cuerpos, ella paso lo largo de su vida creyendo que su amor regresaría. Siempre con su vestido de novia, esperando, en el muelle de San Blás, ella se hizo famosa y conocida en toda la región. Ella era la “loca del muelle de San Blás”. Pero su prometido nunca regresó.

Conociendo esta historia, me pregunto cuántas veces nos quedamos atrapados en algo de nuestro pasado. Nos quedamos atrapados a una relación perdida, a un antigo empleo, un proyecto que no funcionó o algo o alguien que nos hizo daño. Y dejamos que este pasado determine nuestro presente y futuro. Y este no es el plan de Dios. Su deseo es hacer todo nuevo. Por eso, en Isaias 43 está escrito, “olviden las cosas de antaño; ya no vivan en el pasado. ¡Voy a hacer algo nuevo! Ya está sucediendo, ¿no se dan cuenta?“

¡Mi oración hoy es que podamos dejar atrás el pasado y vivir lo nuevo de Dios en nuestras vidas! ¡Que no nos quedemos atrapados en ningún muelle de nuestro pasado!

Oración: ¡Señor, quiero dejar atrás mi pasado! ¡Quiero recibir lo nuevo de ti! ¡Haz todo nuevo en mi vida! Yo te lo pido. Amén

Versículo base: “Olviden las cosas de antaño; ya no vivan en el pasado.
¡Voy a hacer algo nuevo! Ya está sucediendo, ¿no se dan cuenta? Estoy abriendo un camino en el desierto, y ríos en lugares desolados.” (NVI) Isaias 43: 18-19