Desde la eternidad y hasta la eternidad, tú eres Dios

Un bello atardecer sob un rio.

Me encantaría poder viajar en el tiempo. ¿Alguna vez imaginó poder visitar algún lugar del mundo el 7 de mayo de 1930? ¿O quizás el 7 de mayo de 1910 o 1850? Pasar un día en alguna fecha lejana del pasado, para ver cómo era la vida cotidiana de las personas, su día a día, sus costumbres, conversaciones e inquietudes. No sé cuanto a ti, pero esa experiencia me parecería fantástica. ¿Qué fecha o año elegirías visitar?

 Cuando se le preguntó sobre los viajes en el tiempo, Stephen Hawking dijo que “que no tengamos aqui y ahora viajeros del futuro es un excelente argumento contra la existencia de los viajes en el tiempo”. Es cierto, realmente no vamos a viajar atrás en el tiempo. ¡Porque solo nuestro Dios existe de eternidad en eternidad! El hombre no tiene y nunca tendrá control sobre el tiempo. Este dominio pertenece única y exclusivamente a nuestro Dios, el alfa y el omega, el principio y el fin, el que fue y el que será.

Señor, te alabo por su grandeza. ¡Soy polvo y al polvo volveré! ¡Pero tú eres Dios, de eternidad en eternidad! ¡Amén!

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Oración: Señor, el hombre nunca tendrá dominio sobre el tiempo. Sin embargo, eres el creador del tiempo. Por eso eres Dios, de eternidad en eternidad. ¡Amén!

Versículo base: Señor, tú has sido un refugio para nosotros de generación en generación. Antes que los montes fueran engendrados, y nacieran la tierra y el mundo, desde la eternidad y hasta la eternidad, tú eres Dios. Haces que el hombre vuelva a ser polvo, y dices: Volved, hijos de los hombres. Porque mil años ante tus ojos son como el día de ayer que ya pasó, y como una vigilia de la noche. (BLA) Salmos 90:1-4

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