Bunker para escapar del “fin del mundo”
Los millonarios de este mundo ya están buscando formas de escapar del “fin del mundo”, mediante la construcción de búnkeres subterráneos, resistentes a explosiones nucleares, terremotos o inundaciones. Estos búnkers, además de seguros, también son lujosos y contarán con un suministro de água, alimentación y energía, para al menos 1 año, sin tener que volver a la superficie.
Creo firmemente en la seguridad de estos búnkeres contra cualquier acción del hombre o de la naturaleza. Pero solo hay una cosa que puede liberar al hombre de cualquier acción que venga de la mano de Dios: contar con su gracia y misericordia. “No hay quien pueda librar de mi mano. Lo que yo hago, nadie puede desbaratarlo” Isaías 43:13.
Mejor que construir búnkeres seguros y lujosos es contar con la gracia y misericordia de nuestro Señor. De hecho, seguimos contando con ella, ya que nuestro mundo sigue su rutina diaria. Aún la pandemia que vivimos en 2020 ni siquiera se acerca a lo que vendría a nuestro mundo, si Dios no nos concediera su gracia y misericordia.
El mismo profeta Isaías escribe en el capítulo 30, versículo 18: “El Señor los espera, para tenerles piedad; por eso se levanta para mostrarles compasión. Porque el Señor es un Dios de justicia. ¡Dichosos todos los que en él esperan! “
¡Esperar en Dios es más seguro que un búnker! ¡En él esperaré!
Oración: Señor, ¡quiero esperar en ti! ¡No pondré mi confianza en nada construido por la mano del hombre! Mi gracia y tu misericordia me bastan. ¡Amén!
Versículo base: “Desde los tiempos antiguos, yo soy. No hay quien pueda librar de mi mano. Lo que yo hago, nadie puede desbaratarlo.” (NVI) Isaías 43:13