Bloqueador de bendiciones
Una persona malagradecida siempre cree que se merece algo mejor. De hecho, no importa lo que tenga, la ingratitud en su interior la llevará a ver que no es suficiente o pondrá toda su atención en lo que le falta. Ciertamente, cada uno de nosotros conoce a alguien que nunca está satisfecho con lo que tiene y que culpa al mundo, al gobierno, a la iglesia o a la familia por sus propios fracasos.
Estoy plenamente convencido de que la ingratitud es un poderoso bloqueador de bendiciones. Una persona malagradecida no tiene el favor de Dios en su vida. La gratitud es un requisito indispensable para ganar el favor de Dios: “Den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús“, 1 Tesalonicenses 5:18. Lo más interesante de este versículo es entender cuándo debemos dar gracias: en TODAS las circunstancias.
En Mateo 25, del versículo 14 en adelante, está la parábola de los talentos. Y aunque el gran mensaje de esta parábola no es la gratitud, un versículo en particular retrata bastante bien el corazón de nuestro Dios. Cuenta la parábola que cuando el señor de aquellos siervos volvió de su viaje, fue a pedir cuentas y a cada uno de los que habían sido fieles con los talentos recibidos decía: “¡Hiciste bien, siervo bueno y fiel! En lo poco has sido fiel; te pondré a cargo de mucho más. ¡Ven a compartir la felicidad de tu señor!“.
Ser agradecido es una parte importante de ser fiel en las cosas pequeñas. Imagínate si el que recibió 2 mil monedas se hubiera pasado quejándose porque otro recibió 5 mil. O que pasaría si uno de ellos se hubiera pasado el tiempo quejándose de la economía, de la competencia, del calor o del frío. No había tiempo para perder con quejas.
¿Tienes un “bloqueador de bendiciones” en tu vida?
Oración: Señor, no quiero que mi ingratitud sea un bloqueador de bendiciones. Decido reconocer tu favor, y estar agradecido por todo lo que me has dado. Incluso las dificultades. ¡Amén!
Versículo base: “Den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús.”. (NVI) 1 Tessalonicenses 5:18