Ayúdense unos a otros a llevar sus cargas

Un señor ayuda una señora a cargar su pesada maleta en una escalera.

Fue el 11 de julio de 1978. El accidente del Camping de Los Alfaques fue una gran tragedia, que provocó la muerte de 243 personas, cuando un camión cisterna, cargado con propileno líquido, explotó cerca del campamento. Las investigaciones concluyeron que el camión cisterna, que tenía una capacidad de 19 toneladas, estaba cargado con 25 toneladas de producto. Además, el camión no tenía sistema de alivio de presión. Los dos factores añadidos (carga y presión) provocaron la tragedia.

Cuán similar puede ser nuestra vida. Cuando llevamos mucha carga o sentimos mucha presión, “explotamos”. Es por eso que Pablo, cuando escribió a los Gálatas, dijo “Ayúdense unos a otros a llevar sus cargas” y añadió, “y así cumplirán la ley de Cristo”. Ciertamente, a tu lado, hay alguien con exceso de carga y presión, que está esperando una mano extendida. O tal vez eres tú mismo quien tiene mucha carga y necesita pedir ayuda. Y para esto está la Iglesia de Cristo: para ayudar a llevar las pesadas cargas de los demás.

Busca tu iglesia. Involúcrate con ella. Es en la comunión de la iglesia donde encontramos hermanos y amigos dispuestos a llevar nuestras cargas.

Oración: Señor, quiero reunirme en una iglesia, para cumplir tu ley, que es llevar las cargas de mis hermanos y también, que ellos me ayuden a llevar las mías. Amén.

Versículo base: Ayúdense unos a otros a llevar sus cargas, y así cumplirán la ley de Cristo. Si alguien cree ser algo, cuando en realidad no es nada, se engaña a sí mismo. Cada cual examine su propia conducta; y si tiene algo de qué presumir, que no se compare con nadie. Que cada uno cargue con su propia responsabilidad. (NVI) Gálatas 6:2-5

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