Cuando suena el teléfono en la madrugada
Yo no tuve abuelos presentes en mi vida. Los papás de mi madre murieron mucho antes de que yo naciera. Y de mi padre sólo tuve a mi abuela Helena, que no vivia en la misma ciudad que yo y ni siquiera hablaba portugués, por eso prácticamente no había comunicación o relación cercana.
Pero un detalle de la muerte de mi abuela quedó marcado en mi mente: el teléfono sonando en la madrugada. Recuerdo que sonó el teléfono en medio de la noche, cuando estábamos todos dormidos. Pero me desperté y escuché a mi papá contestar el teléfono y recibir noticias de su fallecimiento.
Todavía no sabía el impacto de ese recuerdo en mi mente, hasta que nació mi hijo Zach y tuvo que pasar 21 días en cuidados intensivos, entre la vida y la muerte. No se nos permitió quedarnos con él en el hospital, por eso teníamos que irnos a casa. “Si pasa algo, los llamamos“, dijeron los médicos. Todas las noches, simplemente me entraba el pánico con solo pensar que el teléfono sonaría durante la noche.
Muchos de los miedos que tenemos se originan en nuestras experiencias pasadas, y muchos de ellos están “escondidos” en nuestro subconsciente. Cuando no sabemos por qué reaccionamos de cierta manera, es importante buscar en el pasado experiencias que puedan determinar estas reacciones. Si algo constantemente te irrita o te asusta, pídele a Dios en oración que te revele este hecho oculto en tu pasado que puede ser el “detonante” de esta reacción. Y entrega este hecho a Dios, para que puedas ser verdaderamente libre.
Cristo ya murió en la cruz por todo lo que ha sucedido en nuestro pasado. No olvides que “si el Hijo te libera, serás verdaderamente libre”, Juan 8:36.
Oración: Señor, todo mi pasado, todo lo que me da miedo o preocupación, te lo entrego. ¡Amén!
Versículo base: Así que si el Hijo los libera, serán ustedes verdaderamente libres. (NVI) Juan 8:36