6 razones para confiar en Dios

Recibí este mensaje de una tía muy especial, que me “gané” (vino en el paquete) cuando me casé con Paola, mi esposa: mi querida tía Martha. En medio de la adversidad, ella nos compartió en el grupo de la família, razones por las que podemos y debemos confiar en Dios. Y no puedo dejar de compartir estas grandes verdades sobre nuestro creador.

Aquí hay 6 razones para SIEMPRE CONFIAR EN DIOS:

1. Él me conoce por nombre (Isaías 43:1) – “Pero ahora, así dice el Señor, el que te creó, Jacob, el que te formó, Israel: “No temas, que yo te he redimido; te he llamado por tu nombre; tú eres mío“
2. Él pelea por mí (Éxodos 14:14) – Ustedes quédense quietos, que el Señor presentará batalla por ustedes.
3. Él ha pensado en mí desde antes de nacer (Salmo 139:16) – Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación: todo estaba ya escrito en tu libro; todos mis días se estaban diseñando, aunque no existía uno solo de ellos.
4. Él tiene planes buenos para mí (Jeremías 29:11) – Porque yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes afirma el Señor, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza.
5. Él es mi refugio (Salmo 62:6-8) – Sólo él es mi roca y mi salvación; él es mi protector y no habré de caer. Dios es mi salvación y mi gloria; es la roca que me fortalece; ¡mi refugio está en Dios! Confía siempre en él, pueblo mío; ábrele tu corazón cuando estés ante él. ¡Dios es nuestro refugio!
6. Él siempre está conmigo (Mateo 28:20) – enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.

Como dice tía Martha, estas promesas son como lluvia fresca en el desierto.

Todas estas verdades de la palabra de Dios están disponibles para toda la humanidad. Sin embargo, la gran mayoría de los seres humanos decidió, por sí solo, no tomar pose de ellas. Y por eso nuestro mundo es un lugar de caos, dolor y tristeza, cuando no debería ser así.

Mi invitación hoy para ti es que, al igual que mi tía Martha, usted y yo podamos apropiarnos de lo que Dios ya ha dicho. Porque Dios no cambia. Y si Él dijo, lo hará.

Oración: Señor, siempre quiero confiar en tus promesas, porque sé que tus promesas no fallan jamás. ¡Amén!

Versículo base: Dios no es un simple mortal para mentir y cambiar de parecer. ¿Acaso no cumple lo que promete ni lleva a cabo lo que dice? (NVI) Números 23:19