Más longeva de la historia
La persona más longeva de la historia, cuya edad fue posible demostrar varias veces mediante documentos, fue la Sra. Jeanne Louise Calment, nacida el 21 de febrero de 1875 y fallecida el 4 de agosto de 1997, alcanzando así la edad de 122 años y 164 días, o un total de 44,724 días de vida.
Se han llevado a cabo muchos estudios sobre la vida de la señora Calment, para comprender su longevidad. Practicó la esgrima hasta los 85 años y montaba en bicicleta, un hábito que mantuvo hasta los 100 años. Vivió toda su vida en la misma ciudad, en Francia, una vida libre de estrés o preocupaciones y caminó sin la necesidad de un bastón hasta los 114 años. Por otro lado, fumó hasta los 117 años (eso si es un misterio). Sin embargo, a los 121 años era prácticamente ciega y sorda.
No sé qué pudo haber sido lo más decisivo para que la Sra. Calment viviera tantos años. Pero sé lo que dice la Biblia sobre una larga vida. Y voy a citar tres consejos bíblicos para vivir muchos años:
- Guardar los mandamientos de Dios – Proverbios 3:1-2 – “Hijo mío, no te olvides de mis enseñanzas; más bien, guarda en tu corazón mis mandamientos. Porque prolongarán tu vida muchos años y te traerán prosperidad”
- Honrar padre y madre – Éxodo 20: 12 – “Honra a tu padre y a tu madre, para que disfrutes de una larga vida en la tierra que te da el Señor tu Dios.”
- Pedir a Dios – Salmos 21: 2 e 4 – “Le has concedido lo que su corazón desea; no le has negado lo que sus labios piden (…) Te pidió vida, se la concediste: una vida larga y duradera.”
La esgrima no está en mis planes. El ciclismo es un hábito que ya forma parte de mi vida. Pero más que eso, es mejor obedecer los mandamientos de Dios, honrar a padre y madre y siempre orar, pidiéndole a Dios por una larga vida. Y mis días aquí en esta tierra serán exactamente los que el Señor planeó para mí.
Oración: Señor, deseo vivir muchos años. Y estoy agradecido porque en tu palabra encuentro orientación para una vida larga y duradera. ¡Amén!
Versículo base: Él me invocará, y yo le responderé; estaré con él en momentos de angustia; lo libraré y lo llenaré de honores. Lo colmaré con muchos años de vida y le haré gozar de mi salvación.(NVI) Salmos 91:15-16