El síndrome de las “mochilas cansadas”
Vivo en Colombia y recientemente tuve la oportunidad de viajar a Brasil. En este viaje, para llegar a mi destino final, tuve que tomar avión, autobús y tren. Y pude volver a ver el síndrome de las “mochilas cansadas”.
Aeropuerto de Guarulhos, Sao Paulo, completamente lleno. Personas ocupando los asientos disponibles y junto a ellas, sus mochilas, seguramente “muy cansadas”, también “sentadas”, ocupando un asiento. Lo mismo en la terminal de autobuses de Bogotá. Personas de pie, esperando su autobús, mientras “mochilas cansadas” ocupaban los asientos que deberían ser ocupados por los pasajeros. Y así, en varios lugares a los que fui, pude ver mochilas ocupando asientos, donde debería estar una persona.
El síndrome de las “mochilas cansadas” es el egoísmo, la incapacidad total de empatizar, de pensar en las necesidades de los demás. Estoy cómodamente sentado, veo decenas de personas de pie, y mi mochila ocupa cómodamente un lugar. Al lado de una “mochila cansada” siempre habrá un egoísta.
Este puede parecer un tema poco relevante para una reflexión de Hora de Orar. Sin embargo, es en los detalles donde revelamos lo que hay en nuestro corazón. Quien realmente haya aprendido a ser altruista, a tener empatía, a poner a los demás en primer lugar, jamás ocuparía un asiento con su mochila.
En el texto elegido para hoy, Juan nos advierte: “Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad y le cierra el corazón, ¿Cómo puede habitar el amor de Dios en él?”. Los “bienes de este mundo” no siempre serán dinero. Podría ser ese asiento ocupado por tu mochila.
Que tú y yo no padezcamos el síndrome de las “mochilas cansadas”. Recuerda: junto a una mochila cansada, siempre estará sentado un egoísta.
Oración: Señor, quiero ser alguien siempre atento a las necesidades de mi prójimo. En las cosas pequeñas y en las grandes. Amén.
Versículo base: “Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad y le cierra el corazón, ¿cómo puede habitar el amor de Dios en él?” (BRV2020) 1ª Juan 3:17