La pregunta que todos hacemos
Lo más probable es que te hayas hecho esta pregunta en algún momento. ¿Donde esta Dios? Yo me la hice muchas veces en mi vida. Y aunque sabemos que Dios es omnipresente, es decir, está en todas partes, hay momentos en que no podemos verlo ni sentirlo. Y parece que Dios nos ha abandonado.
Cuando te encuentres en uno de estos momentos, es hora de agudizar su percepción y estar atento. Dios pone a personas en nuestra vida para mostrar su cuidado y su amor. Dios se manifiesta a través de un abrazo, de una sonrisa, de alguien que está a tu lado, pero es posible que no lo hayas notado muy claramente porque esa persona siempre ha estado ahí. Las personas que nos rodean también son la prueba de que Dios nos está cuidando.
Es por eso que la Biblia dice que “el que no ama a su hermano a quien ve no puede amar a Dios a quien no ve“. Entonces me atrevo a decir que cualquiera que no vea a su hermano, que está a su lado, no puede ver a Dios. Porque Dios se manifiesta por medio de esa persona. Debemos estar alertas para ver a Dios presente a través de quienes nos rodean.
Oración: ¡Señor, quiero verte en los que me rodean, en mi familia y amigos! Amén!
Versículo base: “Si alguien afirma: “Yo amo a Dios”, pero odia a su hermano, es un mentiroso; pues el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede amar a Dios, a quien no ha visto. Y él nos ha dado este mandamiento: el que ama a Dios, ame también a su hermano.” (NVI) 1 Juan 4: 20-21