Pensamientos mentirosos
Los estudios indican que un ser humano tiene un promedio de 70,000 pensamientos en un día. Wow! Son muchos pensamientos La palabra de Dios nos enseña que debemos “tomar cautivo todo pensamiento para hacerlo obediente a Cristo”. (1 Corintios 4: 6). ¿Cómo entonces traer 70,000 pensamientos cautivos a Cristo?
Aquí es importante entender que todos los días somos atacados con pensamientos mentirosos, que no provienen de Dios, sino de nuestro enemigo, el diablo, que quiere ver nuestra destrucción. Sin embargo, cuanto más cerca estemos de Dios, mayor será nuestra capacidad de discernir entre los diferentes pensamientos que tenemos en un día. Por lo tanto, con discernimiento podemos identificar qué pensamientos no son de Dios, para que podamos llevarlos cautivos a Cristo.
Los pensamientos mentirosos que no provienen de Dios a menudo son similares a estos:
- – “De nada sirve orar, Dios no escucha y no se preocupa por ti”.
- – “A Dios no le gusta tu oración en el carro mientras vas a trabajar. Dios solo se agrada de las oraciones de rodillas y en tu habitación, a puertas cerradas”.
- – “Estás tan sucio y pecaminoso que tu oración siquiera alcanza el techo de tu casa. Dios no te escucha”.
- – ¿De verdad crees que es suficiente con leer la Biblia 15 minutos al día? No pierdas más tu tiempo con eso”.
- – “Dios solo está interesado en atraparte en tus pecados para poder destruirte”.
- – “Dios no existe. Pareces un idiota cuando oras. Hablas a las paredes”.
Cada pensamiento que proviene del maligno nos hace sentir menos y nos deja más lejos de todo lo que agrada a Dios, especialmente la oración y la meditación en su palabra.
Oración: Señor, quiero quitar de mi mente todos los pensamientos que no provienen de ti. Enséñame, Señor, a discernir entre tus pensamientos y los del maligno. Amén!
Versículo base: “Las armas con que luchamos no son del mundo, sino que tienen el poder divino para derribar fortalezas. Destruimos argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevamos cautivo todo pensamiento para que se someta a Cristo.” (NVI) 2 Corintios 10: 4-5.